La cirugía artroscópica se ha popularizado, y esto es gracias a sus numerosas ventajas, que son mucho mayores a las desventajas. En las intervenciones lo más importante es que:

  • Es menos agresiva. Al tratarse de una cirugía mínimamente invasiva los abordajes se realizan con un mayor respeto a las partes blandas, un menor efecto antiestético de la cicatriz, una menor respuesta inflamatoria y un menor dolor postoperatorio.
  • El cirujano tiene un mejor acceso visual a todas las estructuras articulares y por tanto una menor posibilidad de omitir lesiones. Los diagnósticos también son más claros y exactos porque se realizan en contacto directo con la lesión, y no de forma superficial. Los tratamientos son, a su vez, más integrales.
  • Los efectos secundarios son mucho menores, lo cual facilita el proceso de forma general.
  • Las secuelas son inferiores que en los casos de cirugía abierta tradicional.
  • La recuperación es más sencilla, rápida y con mejores resultados. Al realizar menores incisiones se agiliza mucho la recuperación.
  • El proceso, de forma general, es menos costoso que en la cirugía abierta si analizamos en conjunto.

Esta cirugía, gracias a todo lo citado con anterioridad, es cada día más utilizada en las lesiones musculares en todas las articulaciones superiores e inferiores. No obstante existen algunas limitaciones con respecto a ella:

  • Requieren de una formación específica, larga y difícil.
  • Se requiere también de equipos e instrumentales altamente especializados, y en cierta medida caros. El material es más pequeño y manejable que en la cirugía tradicional.
  • No es adecuada a todas las lesiones. No obstante nuestro equipo de profesionales te orientará en tu caso específico aportándote siempre la mejor alternativa para tu lesión. Nuestro objetivo es que nuestros pacientes estén satisfechos y realizamos todas las intervenciones con la máxima profesionalidad y rigor médico.

Teniendo en cuenta todas las ventajas y limitaciones señaladas conviene añadir que antes de que se utilizase esta técnica los cortes eran mucho mayores para poder acceder a las articulaciones, lo cual generaba grandes cicatrices que tardaban mucho más tiempo en curar. Esto se traducía en mayores dificultades, infecciones, problemas y complicaciones. Además la recuperación era más lenta y costosa para el sistema sanitario.

La cirugía artroscópica tiene buenos resultados y es muy popular y beneficiosas en el campo deportivo, donde son muy frecuentes las lesiones en las articulaciones y la recuperación ha de ser lo antes posible. De forma general en un mes se recuperará la movilidad por completo teniendo la articulación totalmente operativa.


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