La cirugía artroscópica se realiza con la intervención de diminutas cámaras que facilitan la visibilidad de la zona sin necesidad de abrir por completo. Los instrumentos necesarios para este tipo de cirugía son:

  • El artroscópico: un tubo con un sistema de lentes y una fibra óptica conductora de luz que mide entre 2 y 6 milímetros. De forma general los de mayor tamaño se emplean para en procesos quirúrgicos en los que están implicados grandes articulaciones, los de menor tamaño se destinan para las articulaciones menores.
  • El cable de fibra óptica: el cable está formado por un paquete de fibras de vidrio especialmente preparadas con una hoja protectora. Una de las partes está unida al frente de luz y otra al propio artroscópico.
  • Instrumentos quirúrgicos tradicionales: tijeras, pinzas, bisturí, Kerrison, maquinas de afeitar, etc.
  • Instrumentos adicionales: la técnica requiere de otros aparatos adicionales como un sistema de irrigación y distensión de la articulación.
  • La anestesia: dependiendo de la lesión se anestesiará únicamente la zona, de forma que el paciente estará consciente durante la intervención, o se realizará anestesia general para dormir totalmente al paciente.
  • El personal sanitario: como toda intervención se requiere de personal sanitario que colabore en la intervención quirúrgica. El personal auxiliar, médico y de enfermería serán los principales interventores. Su labor es esencial para que todo el proceso sea superado con éxito.
  • Recuperadores físicos: Tras una intervención la recuperación siempre ha de incluir un cuidado específico y en muchos casos de rehabilitación. Para ello los especialistas en el sector realizarán un seguimiento de la lesión para una pronta recuperación. 

La formación en la cirugía artroscópica

Esta técnica quirúrgica requiere de, además del equipo específico, una formación especial. Los cirujanos que realizan estas intervenciones han superado con éxito una rigurosa formación académica y práctica antes de realizar ninguna intervención de este tipo.

En Traumacenter Valencia contamos con especialistas que han dedicado una gran parte de su vida a la formación y las intervenciones de este tipo. Esta formación permite que en la actualidad las implicaciones de la cirugía artroscópica sean muy numerosas y variadas, aplicándolas a todas las articulaciones de miembros superiores e inferiores.

Las aplicaciones de la cirugía artroscópica

La continua aparición de nuevos instrumentales, ahora con cámaras en 3D todavía más reales y eficaces, permiten solucionar la mayoría de las patologías gracias a esta técnica, que además nos permite observar directamente la articulación y sus estructuras y el comportamientos de las mismas de forma directa y funcional. En Traumacenter Valencia somos especialistas en realizar esta cirugía en la rodilla y en el hombro.


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